Memories

Vuelves a casa del cine una noche como otra cualquiera. Piensas en el por qué te martilizas con ese tipo de películas. Le respondes a tu cabeza que son de tu tipo favorito, y punto. Pero sabes que es mucho más complicado de cómo realmente lo ves. Hace ya tiempo que estas sola y sabes que no es eso lo que quieres. Soñar no es cosa de críos, tal y como dicen. Y tu siempre habías soñado con que llegase el dia de tu graduación y pudieras decir: chicas, os presento a mi novio. Tras tus ultimas experiencias piensas que esto es un poco difícil…pero al fin y al cabo, eres positiva..a que si¿? Nada es imposible. Puede que estas películas sean, a demás de un claro entretenimiento y pasatiempo, una especie de búsqueda de llenar ese vacío, aunque solo sea viendo como otros son felices.
Piensas en cual seria el sitio idóneo para encontrarle.. a él, a ese que te ara ser feliz, el que te devolverá la vida. Recuerdas tu vida pasada y piensas en qué fácil era en la infancia eso d las parejas. A través de tu amiga le decias al chico mas guapo si quería ser tu novio..y éste compartiría las golosinas contigo el resto de los recreos. Pero eso ya es agua pasada…y tu forma de pensar no te acompaña. No eres como las demás chicas de tu edad, y eso no es malo, en absoluto. Tu no buscas pasar 1 buen rato, tu buscas a alguien que te haga reir, que te lleve a lugares desconocidos, que te enseñe cosas, que aprenda de ti, alguien a quien le puedas decir Te Quiero con una mirada…seguidamente te viene a la mente el príncipe de cuento de Disney, pero no, no es ese el perfil que buscamos. Alguien que, aparte de superficialmente llamarte la atención en físico, te vuelva un cumulo de nervios cuando aparezca a la vuelta d la esquina, alguien que al verlo te obligue a darle gracias al cielo por su existencia, que te bese y te lleve hasta el infinito… Digamos que te sientes como Wendy y Peter Pan no te ha venido a buscar, o una Bella Swann que no ha encontrado a su criatura predestinada, a su Edward Cullen.